sábado, 31 de octubre de 2009

Si mucho se ha pensado
digo al pasar
como no se pensó
en el aire fresco
cuando estábamos
charlando hasta altas horas de la noche.
Cuando la vida
se medía
en días, horas
y en ver gente
o en tal caso
a esta hora
tengo que ver,
tengo que estar,
tengo que sentir
lo que vendrá…
encontrarse
por voluntad
es hermoso
aunque fuese
esporádicamente
más vale poco
y bueno
que mucho y mediocre.
Salís, entras,
chocas, escuchas
gente que grita
en cuchas bajo
techos y la ciudad
sigue emanando
humos de motores,
combustión para cauchos
que se gastan
en asfaltos
comiendo como cerdos,
cerdos sexuales
cogen a cualquier hora
con luz tenue de lámpara.
Libertador atronadora,
aurora de niños ricos,
el lujo ya es costumbre,
voy a vivir los caprichos
de mi libertad
te decías
mientras enjabonabas
tu gran pene
que eras todo vos,
tu cabeza
y tu corazón,
tu hombría
y tu distracción
hacia otras cosas.
Los adornos
de la casa
te piropean
cuando estas
despierto
desvelado
con insomnio,
los claros
apoyados
en las paredes
como para
nunca irse
de tu día
y la prosperidad
de ser
tan dichoso
y rico te puede.
Le debes todo
a la indiferencia
y a la televisión
a tu doctorado…
Más vale que
te encierres
abstenerte
de salir
desnudo
no vaya
a suceder
que el frío
achique
tus metas.

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